¿Para quién trabajan los delegados de Intersindical Canaria en el comité de empresa?

   En la reunión del Comité de Empresa del pasado día 6 de octubre se llevó, a propuesta de la Vicegerenta,  la cobertura de  la vacante de  titulado medio con especialidad en ergonomía y psicosociología aplicada.

  Esta plaza quedó vacante por renuncia de su anterior titular,  no habiéndose dejado como suele ser habitual –no entendemos el motivo- lista de sustitución para posibles bajas, en la oposición interna. El sistema para la cobertura de plaza que propone  la gerencia es el   de llamamiento al Servicio Canario de Empleo y la consiguiente entrevista absolutamente subjetiva y que, desde el FSOC, hemos criticado en múltiples ocasiones.

  La propuesta que llevó la Vicegerenta, resultó aprobada con los votos favorables de Intersindical Canaria, UGT y CC.OO. y el voto negativo del representante del FSOC.

   Nuestra postura para emitir el voto en contra, se fundamenta en la evidente escasez de recursos con el que fue creado el Servicio de Prevención de Riesgos Laborales y que se agravó con la renuncia de esta compañera. Hace mucho tiempo que la Universidad debería tener ultimado el Plan General de Prevención, añadiéndole además el mandato de la autoridad laboral.

   Ante esta perspectiva  y la existencia dentro de la plantilla de la ULL de un compañero con capacidad probada y acreditada, al haber superado la oposición convocada para su cobertura, y con larga experiencia en el Comité de Seguridad y Salud como delegado de Prevención en representación del Comité de Empresa, que también  presidía el actual Presidente y  con el valor añadido de conocer los entresijos y la estructura nada común de nuestra empresa. Además de esta persona que aprobó la oposición, existen otros compañeros dentro de la plantilla del PAS laboral de la ULL que reúnen los requisitos requeridos para ocupar dicha plaza.
   Es por esto que creemos una obligación del Comité de Empresa el intentar llegar a un acuerdo con la gerencia de la ULL, dada la importancia  tanto para la Universidad como para el personal de la misma, ante  las obligaciones que tiene por delante dicho servicio para que la plaza sea cubierta provisionalmente de manera interna, evitándonos así la pérdida del tiempo que tardará en adaptarse una persona llegada de la calle y que desconoce por completo nuestro sistema de funcionamiento, nuestras especialidades y la diversidad de las mismas. Creemos además que es una obligación del Comité de Empresa el llegar a un acuerdo con la gerencia para que se generen listas de sustitución en las oposiciones internas, evitando así que plazas de esta importancia se vayan a la calle, seleccionándolas además, a través de un sistema de contratación que en algunos casos no dudaríamos en tildar de inmoral. Existen formulas fáciles de negociar, que no perjudican a nadie y que benefician a nuestra plantilla. No se trata de negociar un Convenio Colectivo sino de algo bastante más sencillo, si existiera la voluntad por ambas partes.

  Añadiremos como curiosidad que esta circunstancia ya se ha producido en alguna otra ocasión, donde un auxiliar de servicio ha sustituido una plaza de técnico especialista, tan solo por trabajar en el mismo centro, aunque no tuviera ningún conocimiento sobre la especialidad. Eso sí,  afiliado a Intersindical Canaria, mientras que el compañero que superó esta oposición no lo es.
  Por estas razones, añadiéndole además, nuestra denuncia de lo que, a nuestro juicio se está convirtiendo en un hábito absolutamente irregular y nada transparente, por parte de la ULL  para la provisión de plazas vacantes.