miércoles, 2 de diciembre de 2015

¿Qué está pasando con los sindicatos?

¿Qué está pasando con los sindicatos?


Lo mejor que hemos conocido de las sociedades occidentales se lo debemos a la acción de los sindicatos de clase, a su tesón, a su valentía, a una lucha que se llevó por delante la vida de miles de trabajadores que lo dieron todo para que las condiciones de vida de las generaciones venideras fuese mejor. De ningún modo podríamos concebir la jornada de ocho horas, las vacaciones pagadas, la jubilación o los seguros de enfermedad, accidente o invalidez sin ellos, de ningún modo podrán disfrutar de esos derechos aquellos países, aquellos trabajadores que no los tienen o los han diezmado.
Sin embargo, ni el nacimiento de los sindicatos ni su organización ni resistencia fueron cosas sencillas….
… Se dirá que aquellas personas no tenían nada que perder y por eso actuaban así, y puede ser cierto, pero no del todo, porque hoy, a las puertas del invierno de 2015, gran parte de los trabajadores del mundo carece de cualquier tipo de derechos, incluso los básicos enumerados en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, y quienes hasta hace poco los tenían contemplan impasibles como van siendo devorados por la globalización que sacrifica todo al Dios Mercado y a acrecer la cuenta de resultados de las grandes corporaciones convertidas en gobierno mundial del desgobierno. Quizá la explicación a tanta abulia esté más cerca de nosotros, en la televisión que nos adoctrina directa y subliminarmente y nos hace ver lo anormal como normal, la sinrazón como razón, la violencia como paz y el abuso como justicia; en el aburguesamiento inconsciente de muchos de nosotros que ha tiempo dejamos de sentirnos miembros de una clase por creernos de otra superior; en la propaganda que por todos los medios nos llega para hacernos más refractarios a la militancia y a la agrupación, más proclives al individualismo cerril, a la queja onanista, a ver al otro como un hipotético enemigo y al escapismo, o quizá, simplemente estemos muriendo de éxito mientras soñamos con días de vino y rosas y esplendor en la yerba que se fueron y no volverán….