lunes, 24 de abril de 2023

Tenemos derecho a ser dignamente representados

 

Parece evidente, al menos para nosotros, que el resultado de las elecciones al rectorado no deja lugar a dudas. La desaprobación a la gestión y al continuismo de la rectora Aguilar ha sido mayoritario en todos los sectores y en alguno, como el sector del alumnado, se ha manifestado de manera contundente y rotunda. (76,2 / 23,8)

En lo que se refiere al personal de administración y servicios (65,5 / 34,5) nuestra opinión es que no refleja de manera real la sensación de malestar de la plantilla del PAS. Creemos que la precariedad y eventualidad de muchos de los puestos de trabajo y el temor a la ralentización de los procesos selectivos programados y a los necesariamente venideros, ha condicionado el resultado, suavizándolo de alguna manera. Esta ralentización, aun habiéndose apostado por la continuidad, se habría producido igualmente, teniendo en cuenta que en este cambio de equipo se incluía cambios en la gerencia. Creemos sinceramente que de no existir esta situación el porcentaje de desaprobación de la gestión del equipo anterior sería muy superior al que reflejan los resultados.



Que nadie se llame a engaño, no creemos que exista en la plantilla del PAS de la ULL un 34% de personas satisfechas con la gestión del anterior equipo y su gerente, después del maltrato recibido y de haber colocado en evidencia, fruto de una pésima gestión de los recursos humanos, servicios esenciales de esta institución.

En el comunicado emitido por el ganador de estas elecciones manifestaba su profundo agradecimiento al conjunto de votantes, tanto a quienes han apoyado su candidatura como a quienes no lo han hecho y su profunda convicción de que el servicio público de educación superior se hallaba en grave riesgo, y de que su defensa había de realizarse realizando una mejor gestión de nuestra propia institución y sobre todo su promesa de que Gobernaremos con todas y con todos. Gobernaremos para todos y para todas. Gobernaremos para hacer más grande a la Universidad de La Laguna.

Para nosotros esta declaración de intenciones e inquietudes forman parte del compromiso adquirido con las personas que han depositado su confianza en la opción ganadora e incluso, como el propio rector reconoce, con aquellas que no lo han considerado oportuno.

Así pues, y formando parte de esos todos y todas, seguiremos reivindicando nuestros derechos y especialmente, en este caso, el derecho a ser dignamente representados como miembros de esta comunidad.

martes, 11 de abril de 2023

ELECCIONES AL RECTORADO ULL


 Se acerca el día determinante en el actual proceso electoral en la Universidad de La Laguna. Es durante este proceso cuando las personas aspirantes a obtener la máxima representación de la comunidad universitaria nos presentan sus propuestas e inquietudes solicitando obtener nuestro respaldo para la complicada tarea de representarnos y tomar el mando de la política académica, institucional y laboral, en el futuro inmediato de la Universidad.

Para nosotros esas propuestas e inquietudes deben formar parte del compromiso, que entendemos se adquiere, con las personas que han depositado su confianza en la opción ganadora e incluso con aquellas que no lo han considerado oportuno.

Así pues, y en nuestra condición de representantes, es nuestra obligación exigir el cumplimiento de ese compromiso adquirido. Esto es así en cualquier ámbito de la representación y por lo tanto también lo es para aquellas personas que aspiran a representar a la comunidad universitaria y a dirigir desde el Rectorado las legítimas aspiraciones de esta comunidad.

Parece lógico pensar que en sus programas se incluyen objetivos realistas y accesibles que formarán parte de su compromiso para con todos los sectores que conforman la comunidad universitaria y de las personas que les han otorgado su apoyo e, incluso, para las que no se lo han otorgado.

En definitiva, cuando se ocupa el mayor nivel de representación que se puede obtener en la Universidad se entiende, o al menos así lo entendemos nosotros, que representa y debe defender los derechos y las legítimas aspiraciones de todos los colectivos que conforman esta comunidad y trabajar para la mejora común de la institución a la que se aspira a representar.

Lamentablemente estamos demasiado acostumbrados (algo tendrá que ver con los crecientes índices de abstención) a que en muchas ocasiones, una vez alcanzado el objetivo y amparándose en la comodidad discursiva del posibilismo, se degrade y rebaje ese compromiso.

Sirvan estas líneas para reivindicar nuevamente nuestro derecho a ser dignamente representados como miembros de esta comunidad… Sea quien sea la persona vencedora de estas elecciones.