Un compañero claustral nos envía su reacción por escrito a los ofrecimientos y el oportunismo reiterado de algunos representantes en la ULL, y que por supuesto compartimos y reproducimos:
El pasado jueves recibimos una
carta personalizada de Alberto Marín como miembro de la mesa del Claustro y
como portavoz de su grupo claustral. En ella se ofrece como una especie de
“superportavoz” de las inquietudes de todo el PAS de la ULL. Eso sí, ofrece
discreción y sigilo (¡!) en la relación epistolar con él.
La verdad es que respetamos
las decisiones que tome cada cual. Uno es demócrata y es respetuoso de las
opiniones y acciones de otras compañeras y compañeros, faltaría más. También es
de agradecer el interés por la opinión de todo el colectivo.
Pero, también tenemos opinión
de la labor llevada por Alberto Marín en su trabajo claustral. Más bien habría
que destacar sus reiteradas ausencias, su falta de opinión y mutismo en muchos
claustros, especialmente en aquellos donde se debatía el estado de la
Universidad. Más criticable si cabe cuando es el portavoz del grupo más
representativo del PAS en el claustro y aún más por ser miembro de la mesa del
mismo. No entendemos ahora su cambio de actitud: de ser mudo a ser vocero del
PAS. Nos alegraría que tuviera un papel más activo en los claustros y que
proponga cosas para la mejora del colectivo.
Por otra parte, nuestro
trabajo claustral, concretado en el grupo independiente EUPAS, lo desarrollamos
de la manera más digna posible. Labor muchas veces ingrata y poco reconocida,
pero no por ello cesamos en llevar al claustro los problemas, inquietudes y
propuestas de solución del colectivo de trabajadores/as tanto en el colectivo
funcionario como en el colectivo laboral. Labor que también compaginan algunos
de nuestras compañeras y compañeros tanto en el Comité de empresa, como en la
Junta de Personal. Es un trabajo que va en una doble dirección y entendemos el
Claustro como altavoz de nuestras propuestas.
También somos conscientes de
los problemas del estudiantado, del profesorado más precario, en fin de los
colectivos más débiles. No sólo nos preocupamos de nuestra situación laboral
sino de la sociedad canaria en general como defensores de lo público y que
cualquier persona pueda estudiar en esta universidad sin menoscabo por su
renta.
En fin, Sr Marín entendemos
que se acercan las elecciones a claustro previstas para el 2 de diciembre
próximo y su carta debe ser comprendida como precampaña electoral. Cada cual
utiliza la estrategia que mejor le convenga, pero eso sí le pedimos por favor
que lo diga sin tapujos y no que lo disfrace en una especie de buzón de
sugerencias. Para bien o para mal ya nos conocemos tod@s en la ULL.
Un saludo cordial.